Bravo
One of the best things about working in the live theatre is that we regularly get applause for our work. In fact, we expect it. It’s part of the deal. I often wonder what the world would look like if plumbers routinely got applause from their customers whenever they unclogged a sink. Maybe they wouldn’t charge us so much if we gave them a round of applause as they loaded their tools back into their truck. Imagine how a jaded convenience store worker’s attitude would be different if the routine were to cheer and whistle with gratitude after he rang up your gas and handed you your lottery ticket. Imagine how the lives of sanitation workers would be transformed if we all stood by curbside every week like we were watching a parade when they picked up our trash. We’d cheer and they’d wave as our Amazon boxes were tossed noisily into the truck. Imagine how much more joyous haircuts would be if we always gave our barbers a standing ovation after every trim. Even dreaded dental visits would be warmer if we were in the habit of cheering our dentists with our numb lips while slobbering all over ourselves. Fortunately healthcare workers did indeed get rave reviews this year and applause to go with it. And well-deserved too! Nobody was more heroic in 2020 than doctors and nurses everywhere.
The final thing that all of us at 24th STreet Theatre want to do in 2020, is to give YOU the applause you deserve. If ever there’s a year you deserve a standing ovation for hanging in there, for slogging through the online schooling, for masking up at the grocery store, for finding ways to support those you love when you can’t hug them in person, for keeping your spirits up in this crazy pandemic, for calming yourself when the news of the day overwhelms you... this is the year. You have earned the biggest, most humbling round of applause ever.
And we’re not just making platitudes. This is the year when everything you knew was challenged. Normal was turned upside down and everyone lost something they love. And yet, you coped. Through grief and rage and uncertainty, you put one foot in front of the other and kept on keeping on. Even if you don’t feel like you’ve coped very well at all this year, still you did it. You made it through the shortest, darkest day of the year, and now you’re on your way to the lighter days ahead. To the new year, when we will get Covid under control and begin to rebuild our lives. Hope is in sight and you’re here to see it.
Much has been said this year of all years, but the last thing we want you to hear from 24th STreet in 2020 is our thunderous cheering for you, the way you have done for us over the years. For all your bravery, for all you’ve done to help others this year, for all the empathy you’ve felt, and the love you’ve given, we say Bravo! We are on our feet for you, and you have never deserved it more. You have performed so well in this tragedy. Bravo friends. Bravo.
Una de las mejores cosas de trabajar en la industria del teatro es que regularmente nos aplauden por nuestro trabajo. De hecho, lo esperamos. Es parte del trato. A menudo me pregunto cómo sería el mundo si los plomeros obtuvieran el aplauso de sus clientes cada vez que desatascan un fregadero. Tal vez no nos cobrarían tanto si les diéramos un aplauso mientras suben sus herramientas en su carro. Imagínese cómo sería diferente la actitud de un trabajador de una tienda de conveniencia hastiado si fuera rutina vitorear y silbar con gratitud después de que subió el gas y le entregó su boleto de lotería. Imagínese cómo se transformarían las vidas de los trabajadores sanitarios si todos estuviéramos en la banqueta todas las semanas como si estuviéramos viendo un desfile cuando recogen nuestra basura. Los animaríamos y nos saludarían mientras nuestras cajas de Amazon son arrojadas ruidosamente al camión. Imagínese cuánto más felices serían los cortes de pelo si siempre daríamos a nuestros peluqueros una ovación de pie después de cada corte. Incluso las visitas al dentista temidas serían más cálidas si tuviéramos el hábito de animar a nuestros dentistas con nuestros labios entumecidos mientras babeamos sobre nosotros mismos. Afortunadamente, los trabajadores de la salud obtuvieron críticas muy favorables este año y también muchos aplausos. ¡Y bien merecido! Nadie fue más heroico en 2020 que los médicos y enfermeras de todo el mundo.
Lo último que todos nosotros en 24th STreet Theatre queremos hacer en 2020 es brindarte el aplauso que te mereces. Si alguna vez hay un año en el que mereces una ovación de pie simplemente por sobrevivir el año, por avanzar con dificultad en la educación en línea, por enmascararte en el supermercado, por encontrar formas de apoyar a tus seres queridos cuando no puedes abrazarlos en persona, por mantener el ánimo en esta loca pandemia, por calmarte cuando la noticia del día te abruma ... este es el año. Te has ganado el aplauso más grande de la historia.
Y no solo estamos diciendo trivialidades. Este es el año en el que todo lo que sabías fue desafiado. Lo normal se puso patas para arriba y todos perdieron algo que amaban. Y sin embargo, lo hiciste. A través del dolor, la rabia y la incertidumbre, pusiste un pie delante del otro y seguiste adelante. Incluso si sientes que no has aguantado muy bien este año, lo hiciste. Pasaste el día más corto y oscuro del año, y ahora estás en camino a los días más claros que te esperan. Al año nuevo, cuando controlaremos a Covid y comenzaremos a reconstruir nuestras vidas. La esperanza está a la vista y estás aquí para verla.
Se ha dicho mucho este año, pero lo último que queremos que escuches de 24th STreet en el 2020 es nuestro aplauso atronador por ti, la forma en que lo has hecho por nosotros a lo largo de los años. Por toda tú valentía, por todo lo que has hecho para ayudar a los demás este año, por toda la empatía que has sentido y el amor que has dado, decimos: ¡Bravo! Estamos de pie para ti, y nunca lo has merecido más. Has actuado muy bien en esta tragedia. Bravo amigos. Bravo.